Egunsentian (Al amanecer)
Jose Angel Irigaray

Amanecer en Mugakosoro, descalzos en el rocío, montes y valles envueltos en nieblas y brumas nos habitan, paisaje del espíritu, fragancia lúdica, secuencia de colores en la paleta de lo infinito, salen y entran libres en tu pintura.

Paseo por la arena de la playa, ir y venir al borde del mar, encuentro imaginario, conversando en silencio, seducidos por la vida-sueño, transidos por el devenir humano, tras los pasos huellas en la arena, a guisa de sombras leales, borradas cada vez por las olas.

Transformas en pintura tus íntimas sensaciones y paradojas, sinfonía de tonos delicados y bellos; las mías intentan convertirse en palabra, como en esta conversación que ahora mantengo contigo, apreciado y cordial amigo. Por eso, evocación-recuerdo, escribo en la arena egunsentia —amanecer—, borrada por las olas en la marea alta. Pero el hálito de vida que atesora permanece a través del tiempo, en todos los seres y cosas, en cada lugar, libre… En los brumosos montes y valles del amanecer, en el universo de tus arenas, internas y reproducidas.
Figuración de arenas, de perfiles montañosos en bruma, más reales que la realidad; son los horizontes de tu universo, genuinos autoretratos. Presencia inmanente de la ausencia.

Espacio atemporal, de serenidad, de pérdida y re-encuentro con el ser, al ritmo pausado del abrazo entre arena y mar, de las brumas matinales. En él, un guiño mutuo sortea la angustia, tránsito fugaz, exaltación y engaño, sabiendo que estamos en la trampa-arte atrapados.
Y brindamos al sol del crepúsculo. A lo lejos, ecos de la ágora, de transacciones mercantiles y afines. Al amanecer, egunsentian…

Arenas primordiales
surgidas en los márgenes del sueño en pugna con el deseo,
fuga y refugio
reposo placentero fortuito
horizonte de lo infinito,
rocío al amanecer,
prado de confines bidasotarras, montes y valles envueltos en nieblas aliento vital,
colores en la paleta de lo infinito que salen y entran en tu pintura,
sensaciones primordiales paisajes interiores singulares emoción del autoretrato márgenes del sentir
en silencio,
mirada, trazo, gesto, duda y equilibrio, serenidad y vértigo,
frontera de lo oculto y lo expuesto, figuración de lo indecible abstracción transformada,
caricia de luz al amanecer
teñida de nostalgia en el crepúsculo
en la mirada del “otro” trascendida,
arenas que se extienden más alla del cuadro pintura expandida,
invitación de aventura vital
bajo la niebla
en el ir y venir de las olas,
huellas de pasos en el arenal efímero,
cautivado por tus arenas
deambulo en búsqueda de lo indecible
gesto fugaz y repetido,
en la bajamar escribo unas palabras en la arena, por la pleamar a continuación borradas,
el hálito de vida perdura en el aire
a través del tiempo,
…e il naufragar m’è dolce in questo mare
eco del mar de Leopardi,
en lontananza el surco de un velero.

Gonzalo Chillida. Catálogo exposición, Sala Kubo Kutxa Aretoa, Donostia San Sebastián, 2016.